sábado, 23 de julio de 2011

El telescopio


Quisiera alcanzar el telescopio que está pero no se ve. Prepararme y mirar a través de él. Que me muestre los componentes desconocidos, todo aquello que está escondido, el por qué y para qué, el silencio que se nota y el ruido que se altera, la materia que reacciona como el polo que se aparta, atravesando tu mente fronteriza, sin razón de existir o no existir o qué existir. Un telescopio colorido si así lo quieres, grisáceo también, careciente de finalidad, puramente para eliminar la gravedad y construir un canal magnético entre tú imaginación y la mística envuelta sobre el horizonte de la veracidad.
Sería parte de una brisa exhalada por la naturaleza que viajaría ilimitadamente pero con fin, el que captaría lo extraordinariamente ignorado.
Telescopio que me ayudará a traspasar filtros y ningún pensamiento o emoción tendrá lugar, sólo concentración, revelándome el trayecto inverso del universo y las sogas del alma que escalan hacia él.Lo alcanzaré y le obligaré a montarme sobre la energía más consciente, el líquido más libre, hasta el destello más sobresaliente, para proyectarme hacia un modelo mental donde sólo habite la verdad.
Mi telescopio que no fue pero existirá.






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